Empezó la segunda jornada del juicio por el asesinato de Petrona Centeno (70), ocurrido en Pomán en julio del año pasado. En la Cámara Penal 1 es juzgado Lucas Carrizo (19), que ultimó a la mujer con 40 puñaladas. Según las declaraciones del acusado, cometió el atroz crimen para realizar una ofrenda a San La Muerte.
En el inicio de la ronda de testigos, habló el hijo de la víctima, quien encontró el cuerpo en la escena del crimen, en la Villa de Pomán.
«Tantos cortes, tanta maldad. Ni un animal podía hacer esto», fueron algunas de sus palabras, en notable estado de angustia.
Agregó: «Pensé que esto se ve en las grandes ciudades. No imaginé que podía pasar en Pomán».
Dos de los cinco testigos que declararon hoy hicieron referencia a las creencias del «Gordo Lucas» hacia San La Muerte -a quien le decía «El Bicho»- y al Gauchito Gil.
Se pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo viernes, La Defensa declaró que el acusado va a declarar.
